FSC-CCOO Periodistas | 4 de diciembre de 2024

Claro que se puede

    Las sensibilidades van cambiando, el feminismo y otras masculinidades están calando en una buena parte de las sociedades del siglo XXI y las Campeonas del Mundo han lanzado un mensaje nítido y claro a las nuevas generaciones de futbolistas.

    25/08/2023. Ana Martínez, Agrupación de Periodistas FSC-CCOO
    Celebración de las Campeonas del Mundial de Fútbol 2023

    Celebración de las Campeonas del Mundial de Fútbol 2023

    Yo fui a la EGB, a un colegio público mixto con patio de gravilla. En el recreo, las niñas saltábamos a la comba, los niños jugaban al fútbol. Era un deporte de y para hombres; las mujeres no sabíamos jugar. Mejor aprender a coser, lavar y planchar. Treinta años después viví la misma situación con mis hijos cuando fueron a Primaria, y dos décadas más tarde, jugadoras profesionales ganan un Mundial de Fútbol.

    Han pasado más de 40 años y parece que hemos avanzado: la hazaña de la selección absoluta de Fútbol Femenino ha ido más allá del triunfo deportivo, ha demostrado que sí se puede y que el patriarcado imperante y cavernoso de nuestra sociedad tiene los días contados. Una quimera, pues muy a pesar del movimiento feminista y de nuestra esperanza de que el derecho a la igualdad abola el rancio machismo, ha llegado el macho alfa de turno, ha dado un golpe en la mesa y ha minimizado el éxito colectivo de las mujeres deportistas. Nosotras no podemos vencer por mérito propio, en todo caso, el Mundial lo han ganado porque “nuestras mujeres están aprendiendo a jugar al fútbol tan bien como los hombres” (dixit: alto comisionado en la UE, Josep Borrell).

    El beso que el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, estampó sin consentimiento -ni ganas de darlo- a Jenni Hermoso es, simple y llanamente, repugnante, inadmisible, impresentable y, en ningún caso, aceptable, ni romántico, ni quijotesco, al igual que los titulares de algunos medios de comunicación y las opiniones de periodistas como Manolo Lama: ''Yo creo que los que se cabrean es porque nunca le han dado un beso a ellas". Al periodismo con perspectiva de género le queda mucho camino por andar.

    La dimisión de Rubiales tendría que haber sido inmediata, pero claro, pensemos en quiénes son los integrantes de la RFEF, esos ‘señoros’ que todavía hoy ven en ese acto de violencia sexual un simple ‘pico’ provocado por la emoción del momento. Pobrecitos. En fin, no quiero pensar lo que puede estar sucediendo o ha sucedido en clubes y en vestuarios con las futbolistas, visto este blanqueamiento que han dado algunos periódicos, radios y televisiones a este problema de abuso de poder masculino sobre el femenino.

    Teniendo claro que la igualdad entre mujeres y hombres sigue en pañales, los medios de comunicación, las y los profesionales de la Información, deberían tener asumido un compromiso inequívoco con este derecho, deben transformarse en agentes activos de la igualdad, con informaciones y lenguajes ajustados a los tiempos que vivimos y a las demandas del 50% de la población, ‘esas’ habitantes de este planeta, ciudadanas de pleno derecho según las leyes, que hemos estado siglos invisibilizadas y sometidas al patriarcado.

    Afortunadamente, el ‘caso Rubiales’ no ha pasado desapercibido, su fechoría salió a la opinión pública de forma inmediata, lo que también demuestra que las sensibilidades van cambiando y que el feminismo y otras masculinidades están calando en una buena parte de las sociedades del siglo XXI. Mientras deshojan la margarita sobre el presidente de la RFEF, las Campeonas del Mundo han lanzado un mensaje nítido y claro a las nuevas generaciones de futbolistas: claro que se puede.