FSC-CCOO Periodistas | 28 de marzo de 2024

La Agrupación de Periodistas de Comisiones Obreras lamenta profundamente la muerte de David Beriain y Roberto Fraile en Burkina Faso

  • Los dos periodistas asesinados han pagado con la vida su vocación y entrega al oficio de informar desde donde están las noticias, más allá de los despachos y los comunicados oficiales

27/04/2021.

La Agrupación de Periodistas de Comisiones Obreras lamenta profundamente la muerte de David Beriain y Roberto Fraile en Burkina Faso mientras realizaban su trabajo de investigación periodística sobre la caza furtiva en el país africano. En estos momentos de dolor y desolación, además de acompañar a los compañeros de los dos fallecidos, CCOO muestra sus condolencias a sus familiares y amigos por los incomprensible asesinatos de David y Roberto.

Los dos periodistas asesinados han pagado con la vida su vocación y entrega al oficio de informar desde donde están las noticias, más allá de los despachos y los comunicados oficiales, entrando a fondo en los hechos cotidianos que en muchas ocasiones suponen penuria y muerte para la gente y que suelen ser invisibles a los grandes medios de comunicación. David y Roberto, como los cientos de periodistas muertos en los últimos años en conflictos bélicos, territorios asolados por guerrillas y escuadrones de la muerte y gobiernos alérgicos a los derechos democráticos y de libre información, han ofrecido un servicio a la ciudadanía de todo el mundo con sus reportajes, denunciando injusticias, mafias, intereses creados entre gobiernos corruptos y grupos de delincuentes, poniendo de relieve la vulneración de los derechos humanos en gran parte del planeta y realizando un periodismo de primera línea.

Y para realizar este periodismo de calidad y necesidad, David Beriain y Roberto Fraile se vieron forzados a trabajar fuera del amparo laboral de los medios de comunicación estandarizados, cada vez más entregados a un periodismo de salón y moqueta, que a su vez sí se sirve de estos periodistas que se juegan la vida a cambio de comprarles sus trabajos periodísticos a precios de vergüenza, sin el apoyo profesional y laboral que supone tener un contrato laboral y el amparo de una empresa, viéndose forzados a ser autónomos o crear pequeñas empresas sin apenas posibilidades de defenderse empresariamentel ante el oligopolio de unos pocas empresas de comunicación, que seguramente insertarán estos días sentidas necrológicas por David y Roberto,para seguir al día siguiente aprovechándose de los periodistas autónomos y freelance para tener estupendas noticias a precios de saldo y sin más compromiso para con éstos que el importe que a su exclusivo criterio se merecen.

Va siendo hora de regular la situación de los colaboradores en el periodismo, no tanto como seguro para evitar situaciones como estos asesinatos, algo que no se puede blindar al completo, pero sí pagar justamente estos trabajos y dar un amparo de seguridad a los familiares directos en caso de accidentes graves y muerte como accidente laboral.